Me Escondo en la Literatura

Para no aullentar a los sordos me escondo en la literatura, para jugar con las palabras me alimento de su esencia y me limito simplemente a repetir las frases y aforismos que me parecen interesantes, quizá por eso me gusta Lichtenberg, Nietzsche, Pessoa, Ciorán, Caraco, Ortega, etc...
Me escondo en la literatura para que la voz no arruine lo hermosos del silencio y del pensamiento que brota al momento de leerla. Soy tímido de voz y extremadamente atacante con las palabras. ya no juego con rimas y poesías como en mi adolescencia porque al fin pude tenerle respeto a tan complejo idioma; entre más leí poesía, más dejé de escribirla, sin duda me fuí por el camino de la filosofía y el cuento corto.
En esta noche más de vigilia me escondo en la literatura para sólo escribir lo que siento, en este sin sentido de agonía se hace presente la alegría de un crepúsculo apocalíptico de la tarde de hoy. El cielo rojo hizo palpitar mi corazón, pintó en mí una sonrisa y en cada esquina de la alucinación un fresco aroma de mujer que invita a cerrar los ojos para hacer un viaje astral.
Es tan complejo esto de decir lo que uno siente cuando va caminando por el filo del abismo y de repente quiere retomarse de una rama con figura de brazos de mujer, mismos que quizá nos empujaron hasta esa instancia. Lo consiguiente es aferrarse a la vida y entonces acudir al abrazo, pero no hay seguridad de que estas ramas resistan o nos quieran salvar.
Al borde del abismo para seguir en la vida, el ser humano imagina cosas, incluso que esos brazos que se vislumbran son urgentes para salvarse de tan cruel caída. Así sucede y no quiero confundirme el día de hoy como me ha pasado muchas veces antes, bien decía Nacho Vegas: "La vida es en parte buscar placer y en parte hallar dolor..."
Me escondo en la literatura, detrás de todo lo que leo y escribo hay un enigma tan fácil que resolver, un placer de disfrutar la vida en su máximo estético que siempre es por si mismo un subjetivismo, una ruptura con la moral cotidiana.
Siempre hablo del universo, porque es lo más grande que pueda existir, una metáfora que me permite describir cosas al aire, de ponerle sacos a quien se los mida, es por eso que me escondo en la literatura para describir los sentimientos que me hacen vivir. En tales circunstancias el lenguaje hablado no me permite jugar tan mágicamente con las metáforas porque hoy en día no se acostumbra la forma correcta de decir las cosas y con todos los recursos retóricos que implica el poder decirlas.
Me escondo en la literatura para desnudar mis pensamientos y refugiarme en ellos. Me escondo en las palabras escritas para encontrar la luz de mi sendero y cubrirme de la lluvia del egoísmo. Me sumerjo en el océano de las letras para intentar ser feliz y encontrar otra forma estética de decir lo que uno piensa.
Palabra y Pensamiento van de la mano, no se quien antes ni quien después y bajo este binomio perfecto sé que puedo callar muchas cosas, decir muchas otras. Lo que sí es que no dejará de ser un ejercicio cotidiano.
Leer, Escribir, Hablar.... no lo sé.... Lo que sé es que estoy prendido de su luz... sí, usted sabe quien es usted... y yo apenas descubro quien soy... alguien que en sus brazos quiere salvar mi caída al abismo.. es usted... literatura...

Comentarios

  1. Worale, me gusto el final... jejeje a mi siempre me gustan los finales jajaja

    La literatura, a veces en un escrito, poema o historia puedes meter escondidos detalles que no quieres revelar directamente

    :D


    ByE cuidate mucho

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