HOY SE LE LLAMAN RECUERDOS.

El Espacio se abre ante mis ojos, la puerta de diez candados se rompe. Entonces en un lenguaje del cielo el arcoíris a lo lejos.. espejismo de agua y de luz. El viento se vuelve caricia de sus cabellos, el frío que atraviesa las montañas acaricia nuestros rostros, Ya no hay imagen de nada, sólo dos ojos que me miran y entonces ella se siente cabizbaja, sonríe, sus dedos cosquillean con la palmas de mis manos.. Ella habla, escucho, sonríe y la escucho. Las incoherencias de mis argumentos:  la verdad y el cariño profesado se vuelven capítulos  de una historia escrita por todo ser humano... sin palabras y papeles.

Escribo mi vida en su cuerpo... los suspiros, el cálido aliento nos hace perder el frío... se les llaman abrazos... Las lágrimas no son por el "adiós", sino por el "hasta luego". Entonces me voy alejando sin mirar atrás, sin mirar atrás como cuando salí de la cárcel... Y aún así fuera.. no puedo mirar atrás hay una lucha constante entre el cuello y los ojos, entre los pasos que a prisa rompen la ciudad... me alejo, cruzo montañas y vuelvo a casa... No hay mares, no hay paisajes desiertos... sólo edificios y gente, dicen que se les llama soledad.

Hoy un amigo me dice... "Ya venciste todo Goliat". Yo le contesto que la batalla más cruel es  con uno mismo... Y ese amigo con su piano, con su calidez humana y con su cariño me vuelve a tender el abrazo y me dice todo estará bien.  Como aquel día que golpeteó mis manos con una baqueta para que yo pusiese bien los acordes la guitarra, renací con la música... Es verdad, este señor me hizo pensar que siempre habrá un lugar donde expresarse y un lugar donde desahogarse. Es verdad... todo estará bien.

Incluso... Se puede mirar atrás... hoy se le llaman recuerdos... Y es tan difícil desapegarse en libertad.. y están complejo enfrentar la libertad... y es tan fácil acordarse que hay libertad. y es tan difícil que sus dedos vuelvan a cosquillear mis palmas... en ese embrujo en el cual ella trataba de modificar las líneas de mi destino para unirlas con el suyo... lástima que el dibujo marcó otro camino.